CDs: Lúnasa - Sé

Lúnasa -Sé. 2006 Compass Records

El grupo irlandés Lúnasa acaba de sacar su sexto trabajo, apropiadamente titulado "Sé" (Seis en gaélico). La mayor novedad del grupo fue la salida del guitarrista Donogh Hennessy de la formación para dedicarse a otros proyectos. Lúnasa trabaja ahora con el guitarrista Paul Meehan o con Tim Edey, aunque los miembros oficiales del grupo son sólo el violinista Sean Smyth, el flautista Kevin Crawford, el gaitero Cillian Valelly y el contrabajista (y productor del cd) Trevor Hutchinson.

A pesar de la salida de Hennessy, el grupo ha conseguido mantener lo que ya reconocemos como "sonido Lúnasa". Cualquiera que haya escuchado los trabajos anteriores sería capaz de atribuir el primer tema del album al grupo, lo escuche donde lo escuche. Y esto, a pesar de conservar el sonido típico del grupo, no es bueno a la larga. El primer tema es un ejemplo de lo medianamente predecible que se ha vuelto el grupo. El concepto es demasiado similar al primer set del primer album de Lunasa, lo único que cambia es que los dos primeros temas eran ternario/binario en el primer cd (ahora es al revés) y que hay una pequeña transición antes de la tercera melodia. Parece que o siguen teniendo ideas muy similares o que cualquier tiempo pasado fue mejor.

Similitudes aparte, no cabe duda de que el nivel de los músicos es igual de impresionante que siempre y que siguen estando en ese punto excelente que mezcla temas temas tradicionales con composiciones modernas de músicos relativamente conocidos. El segundo corte del album es un buen ejemplo pues empieza con una melodía de la flautista Emer Mayock, sigue con Above the Garret, un tema tradicional, para terminar con una excelente composición de Valelly, Leckan Mhór.

Mencionando otros cortes interesantes, el trecero son dos composiciones. La primera es un tema lento de Crawford y la segunda una composición del gaitero Diarmuid Moynihan (Calico) que es uno de los compositores más prolíficos de los últimos tiempos. Una melodía preciosa interpretada con uilleann pipes en Do.

La pequeña sorpresa del cd viene en el quinto corte, en lo que podría llamarse un set internacional, titulado Midnight in Avilés. El set comienza con un tema de Javier Tejedor, N'Alcordanza, con la particularidad de que han añadido un interesante trombón de la mano de Karl Ronan. El set sigue con un tema bretón tradicional aprendido de Soig Siberil y acaba con una composición de los también bretones Youen Le Bihan y Daniel Le Feon.

Para que no todo sean reels y gigas, nos encontramos tambien con un set compuesto por un slide de Maire Breatnach, acompañado de otro tradicional, que pasa a una polka del violinista Brendan Larrisey (Arcady) y otra de Alan Kelly (uno de los temas preferidos del que suscribe). La primera grabación de este Trip to Dingle fué en el albúm Out of the Blue de Kelly, que también fue producido por Hutchinson. Uno de los mejores temas del disco.

No puede faltar el tema de whistles y uno en 7/8, que apropiadamente están en los temas 7 y 8. Para compensar la relativa predictabilidad de los dos temas anteriores, el disco sigue con un set de temas escoceses. El primero, Showacho de Roddy McDonald, fue popularizado por Gordon Duncan en su cd Just for Seumas y se toca en multitud de bandas de gaitas. Le han dado un acompañamiento curioso a un tema al que algunos estabamos acostubrados a sólo a una gaita. El segundo tema es Portobello, de Fred Morrison, que ya apareció en To the Moon de Capercaillie.

En definitiva este es un cd absolutamente recomendable. El problema de Lúnasa es que probablemente nunca podrán volver a hacer albums como los dos primeros. El grupo es excelente y la forma de tocar impecable, pero falta ese punto de genialidad que aportaban McGoldrick y McSherry, probablemente a la hora de elegir los temas. A pesar de que Sé y The Kinnity Sessions presentan una mejoría con respecto a un Redwood bastante soso, Lunasa se ha acomodado al usar las mismas fórmulas una y otra vez. Para una persona que escuche un cd independientemente de los demás, eso no representa ningún problema, pero para los que seguimos al grupo... a lo mejor hemos escuchado demasiada música (o no nos basta con que el flautista se ponga una máscara de tigre).